INTERVENCIÓN
EL OBJETIVO ES ROMPER LA NEGACIÓN DEL ADICTO Y QUE ACEPTE EL TRATAMIENTO¿Qué es la intervención?
La intervención consiste en una reunión previamente organizada y guiada por un profesional en adicciones, de las personas que son importantes para el adicto, familia y seres queridos, con el fin de ayudar al adicto con tacto, profesionalidad, comprensión y respeto a aceptar que para recuperar su vida y su bienestar necesita un tratamiento.
En esta reunión planificada no se culpabiliza al adicto, no se le dice lo que tiene que hacer, se le trata con máximo respeto y comprensión, pero de forma asertiva se le ayuda a que él mismo tome la decisión de ponerse en tratamiento, de motivar su deseo por recuperar de nuevo su vida y de elegir la recuperación en lugar de la destrucción.
Esta reunión está previamente dirigida para cada caso, se evalúa cada necesidad de forma personal, no existe un modelo estándar de intervención, cada adicto, cada familia necesita un tipo de intervención diferente. No es una reunión familiar, donde se le comunica al adicto lo que tiene que hacer, sino una técnica terapéutica que ayudará al adicto a entender su problema y a que la familia deje de ser manipulada y controlada por la adicción de uno de sus miembros.
Muchas veces se piensa que la intervención es una “encerrona” algo muy complejo, y agresivo, pero no es así, cuando un miembro de una familia solicita una intervención, lo hace desde el amor y desde el convencimiento de que lo complejo es seguir intentando controlar el consumo de un adicto. Está comprobado que solo con que un solo miembro del sistema familiar del adicto cambie su respuesta al consumo del adicto, la manera de comportarse a la que el adicto se ha acostumbrado, todo el sistema familiar cambia. La intervención eficaz es un proceso estructurado y sencillo.
¿Necesitas ayuda?
¿Por qué es necesaria la Intervención?
Uno de los mayores problemas de la enfermedad de la adicción es la negación, la gran mayoría de los adictos no aceptan la enfermedad y se niegan a ponerse en tratamiento.
Hace unos años se creía que si el adicto no quería recuperarse no se podía hacer nada. No es así, la gran mayoría de la personas que sufren esta enfermedad se mueven entre el deseo de dejar de sufrir las consecuencias del consumo, y la imposibilidad por dejar de consumir la sustancia. Por eso es necesario ayudarles a entender lo que les está destruyendo la vida.
El consumo de drogas (cocaína, alcohol, cannabis, éxtasis etc) puede llegar a alterar la conducta de los consumidores, su manera de sentir y de pensar, porque afectan directamente a la neurotransmisión que es el proceso utilizado por las neuronas para comunicarse entre ellas. Por eso muchas veces los los adictos viven una realidad paralela, y los familiares sienten que “son otra persona” que han cambiado y que no parecen los mismos.
Cuando un adicto se recupera son los familiares y amigos los primeros en darse cuenta de los cambios, vuelven a reconocer de nuevo al adicto como la persona que fue antes del consumo, y muchos familiares nos han dicho “gracias por devolverme a mi hijo, mi marido, mujer etc”.
Lo que no ayuda a detener el consumo, lo facilita. Aunque se haga con amor.
¿Cuál es el objetivo de la intervención?
La intervención se centra principalmente en dos objetivos:
1. Romper la negación del adicto
2. Mostrarle que su entorno hará lo necesario para ayudarle
¿En qué consiste una intervención?
La intervención podemos estructurarla en las siguientes etapas:
Pídenos una cita sin coste ni compromiso, y los expertos intervencionistas del centro te darán la información y la guía que necesitas, te recomendarán una serie de cambios básicos que necesitas realizar si quieres que la situación que tienes en casa cambie, y aunque no te animes a solicitar una intervención de momento, podrás elegir tu siguiente paso con más criterio y orientación.